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Ford S-Max

Estrena tecnologías avanzadas de ayudas a la conducción

El Ford S-Max estrena retoques y nuevas tecnologías en una gama que se fabrica para todo el mundo en la factoría valenciana de Almussafes cargada de innovaciones. Está a la venta desde 31.900 euros.

El S-Max es un monovolumen de hasta siete plazas muy versátil y que ofrece hasta 32 combinaciones de asientos y maletero y con los asientos de la segunda y tercera fila fácilmente abatibles.

La nueva generación del Ford S-Max ofrece un modelo algo más largo y ancho que el anterior por ello también ha mejorada su capacidad interior y del maletero que parte de 700 litros con cinco asientos y puede llegar a los 2.200 litros con solo una fila disponible.

El nuevo S-Max se presenta con una gama muy potente de motores: cuatro versiones en diesel, de 120, 150, 180 y el biturbo de 210 CV, y dos en gasolina con 160 y 240 CV, todos con tecnología stop/start. Las versiones altas de gama pueden disponer de tracción total y también en toda la gama se puede elegir el cambio de doble embrague Powershift.

Hemos tenido la oportunidad de realizar una primera TOMA DE CONTACTO con el nuevo S-MAX. Este monovolumen es un coche muy versátil, que está disponible con cinco o siete plazas. A bordo nos ha parecido cómodo y muy actual, con diversos huecos para guardar objetos. Las dos plazas suplementarias no sirven para hacer un largo viaje, porque además merman el maletero, pero sí que son suficientes y cómodas para el día a día.

Es un coche con una buena oferta de ayudas a la conducción, como por ejemplo el Limitador Inteligente de Velocidad, que nos ha gustado mucho su funcionamiento. Este sistema facilita la vida al conductor de una forma considerable. Se trata de una ayuda que evita sobrepasar el límite cuando este se encuentra por debajo de lo programado. Es decir, que evita que por un despiste el conductor sobrepase la velocidad permitida en cualquier circunstancia, por ejemplo al pasar por una zona de obras o al entrar en una carretera comarcal. Este dispositivo trabaja conjuntamente con el sistema de reconocimiento de señales para poder ajustar automáticamente la velocidad.

Funciona a velocidades de entre 30 y 200 km/h y garantiza una deceleración suave porque no actúa sobre los frenos sino que limita la cantidad de combustible que llega al motor. También utiliza una alarma en caso necesario, por ejemplo en descensos pronunciados. Por supuesto, se desactiva pisando firmemente el acelerador.Ford-S-MAX

También hay otras tecnologías disponibles como  la Ayuda en Precolisión con Detector de Peatones, que puede detectar a viandantes cuando van a cruzar delante del vehículo y frenar de manera automática si el conductor no responde a los avisos.

Un detalle también muy interesante es el sistema que equipa a los cinturones traseros con un airbag que se infla y protege además de retener al pasajero en caso de accidente.

La segunda generación del Ford S-Max  también incorpora un sistema de luces largas que evita deslumbrar a los conductores de otros vehículos manteniendo al mismo tiempo un nivel máximo de iluminación de otras áreas. Una cámara frontal doble ubicada en la rejilla delantera permite que circular por cruces resulte más fácil.

La gama de motores es muy interesante, el único que puede quedarse algo corto es del TDCI de 120 CV que más bien está indicado para una utilización más urbana, aunque su ventaja está en el consumo: 5,0 litros/100 km. El resto de motores disponen de potencias muy interesantes para dar prestaciones al S-Max.

GALERÍA DE IMÁGENES (Haz click sobre la foto para ampliar)

En cuanto a la gama de precios, las dos versiones de acceso a la gama, en diesel y gasolina: el 2.0 TDCI de 120 CV y el 1.5 Ecoboost de 160 CV se ofrecen por el mismo precio: 31.900 euros. El S-MAX se ofrece con dos niveles de equipamiento: Trend y Titamium

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