≡ Menu
BMW i3 REX thumbnail BMW-i3

BMW i3 REX

Eléctrico, premium y con autonomía extendida

El BMW i3 es un vehículo eléctrico que tiene la posibilidad de equipar un pequeño motor de gasolina que hace más viable una solución que poco a poco se impondrá en nuestras carreteras pero que de momento nos cuesta aceptar por diferentes razones.

En Motor y punto hemos tenido la oportunidad de probar una unidad de este modelo eléctrico con la opción de autonomía extendida, denaminada REX,  y le hemos encontrados muchas ventajas aunque también algún que otro inconveniente que te contamos a continuación.

El primer problema al que se enfrenta el i3 en España es que hay muy pocos puntos de recarga con lo cual su conductor ideal es el que puede recargar en casa con facilidad y/o en el centro de trabajo, por ejemplo.

La autonomía del i3 es de 110 kilómetros que, en teoría, deben dar para una jornada completa, por ejemplo para ir al trabajo, a recoger a los niños al colegio, a hacer la compra… Pero en ciudades tan grandes como Madrid o Barcelona, puede quedarse un poco escasa. Entonces ahí es donde entra la eficacia del pequeño motor de gasolina que se puede equipar como opción. Este propulsor adicional de dos tiempos que tiene solo 34 CV de potencia, frente a los 170 CV que proporciona el motor eléctrico del i3.

GALERÍA DE IMÁGENES (Haz click sobre la foto para ampliar)

AUTONOMÍA EXTENDIDA

Nada más abrir la puerta del vehículo ya notamos que es un coche diferente. Sobre todo por su cuadro de instrumentos, pequeño y sencillo, una pantalla de poca altura en la que se ofrece el funcionamiento del vehículo. En la posición  de reposo, el cursor está en el centro y según hagamos una conducción más ecológica o más deportiva, ese cursor se desplaza a izquierda o derecha. Controlando ese indicador sabremos si estamos haciendo una conducción más o menos eficiente.

Por debajo de este indicador encontramos lo más importante que es el medidor de autonomía, en forma de barra. Y en el lado izquierdo se ve otra barra que hace lo propio con la autonomía en el modo extendido y con el propulsor de gasolina encendido.

Sin duda, la autonomía es el tema clave en un vehículo eléctrico. Por ello, lleva un tercer indicador  que es digital, en el que se analiza el total de kilómetros que puede recorrer sin parar a repostar.

El i3 siempre funciona con el motor eléctrico, pero en el caso de una versión con el sistema de autonomía extendida, como era el de nuestra prueba, el motor adicional de gasolina completa esa autonomía.

Si disponemos de esta opción, cuando las baterías se están agotando, el i3 automáticamente conecta el motor de gasolina sin que el conductor tenga que intervenir. Este pequeño motor de gasolina es suficiente para el tráfico urbano porque generará electricidad de sobra para mover el vehículo pero cuando nos quedamos sin electricidad en carretera y el propulsor de combustible entra en funcionamiento el coche se vuelve algo más ‘perezoso’, porque el motor de gasolina se ve muy justo para producir suficiente energía para el eléctrico, para el compresor del aire acondicionado y demás. Ya que prioriza la energía para el motor y asegurar el movimiento.

Para no llegar a esto, BMW ha previsto una solución intermedia. Una vez que se ha agotado un tercio de la energía de la batería, el conductor puede forzar que el motor de gasolina funcione para cargar parte de la batería.

El coche dispone de tres modos de conducción muy diferenciados. El punto de partida y el modo más habitual es el confort. En este caso el conductor dosifica por sí mismo el funcionamiento del coche, lo que le permite acelerar mucho cuando quiere o hacer una conducción más tranquila. Por encima encontramos el modo Eco Pro y el modo Eco Pro+.

Si en el modo Eco Pro el coche acelera muy deprisa, como un buen BMW, si pisamos fuerte el acelerador, en el caso del Eco Pro+ acelera con mucha lentitud, tratando de optimizar todo para reducir al máximo el consumo. El modo Eco Pro es una posición intermedia, que permite acelerar un poco más que en el modo más ahorrador, pero que de alguna forma supone una limitación frente al modo “confort”.

El BMW i3, como cualquier coche eléctrico, requiere una conducción diferente y no tiene mucho sentido intentar hacer una conducción rápida y ágil. Sin duda, este eléctrico –y también el resto de los que ofrece el mercado- ha sido fabricado para una conducción ante todo eficiente.

DISEÑADO PARA EL TRÁFICO URBANO

Eso no significa que no tenga alegría en su marcha. Puede moverse con agilidad a 120 km/h e incluso más, pero a sabiendas que a esa velocidad consumiremos mucha electricidad. En realidad ha sido diseñado para el tráfico urbano, donde se mueve como pez en el agua.

Otra gran diferencia entre el i3 y el resto de los vehículos está en su estética, completamente distinta a lo que estamos acostumbrados. Tanto por dentro como por fuera. Su diseño es exclusivo, con una apertura de puertas diferente, con un interior muy minimalista, pero con el sello inequívoco de BMW.

Ya desde su acceso al habitáculo, con dos puertas delanteras más grandes que abren en el sentido convencional y otras dos, para los asientos posteriores, que son más pequeñas, y que abren hacia atrás. Con ello se accede con bastante facilidad a un habitáculo amplio para cinco personas en la que quizá lo más llamativo es su buena altura disponible, lo que transmite una gran sensación de espacio a sus ocupantes.

El salpicadero también es completamente innovador, con un estilo muy moderno con  unos materiales ecológicos que dejan muy claro que este BMW representa una nueva hornada de vehículos muy tecnológicos, innovadores y también con un estilo muy distinto.

El tiempo de recarga en un enchufe convencional es de 8 horas. En un enchufe de 400v se carga en una hora.

En cuanto al precio, antes de nada hay que tener en cuenta que es un BMW, un vehículo eléctrico del segmento premium, con una tecnología muy innovadora y materiales tan sofisticados como la fibra de carbono.

El BMW i3 equipado solo con el motor eléctrico tiene un precio de 29.000 euros con el descuento del Plan Movele incluido. Y si se trata de la versión REX con el motor de gasolina, que sin duda es la versión más interesante, entonces el precio sube 4.500 euros. BMW ofrece una oferta de financiación por 250 euros al mes.

En cuanto al coste, si se utiliza solo con electricidad, que es para lo que está hecho, el coste de recargar completamente una batería varía mucho con la tarifa que tengamos, pero pude oscilar entre un máximo de 2,50 y un mínimo de 1,20 euros. Es decir, que haremos hasta 110 kilómetros, e incluso algo más en ciudad, con un equivalente de consumo de uno o dos litros de gasolina.

DATOS TÉCNICOS

BMW I3 REX
Motor eléctrico: De corriente continua. Trasero trasversal.
Potencia máxima: 170 CV
Par máximo: 250
Motor de gasolina: 2 cilindros. Trasero trasversal. Inyección indirecta
Potencia máxima: 34  CV / 4.300 rpm
Par máximo: 55 / 4.300 rpm.
Batería: Iones de litio
Dimensiones (largo/ancho/alto): 3.999 / 1.775 / 1.578 mm
Distancia entre ejes: 2.570 mm
Capacidad del maletero: 260 litros
Cambio: Automático 1 velocidad
Tracción: Trasera
Velocidad máxima: 150 km/h
Aceleración de 0 a 100 km/h: 7,9 segundos
Consumo medio homologado de gasolina: 0,6  litros/100 km
Emisiones de CO2: 13 g/km
Precio: 29.000 euros con Plan Movele

Fotos: Carlos Cancela

ENLACES QUE TE PUEDEN INTERESAR
· BMW i8

Next post:

Previous post: